El Club Joventut Badalona ha visto cortada la racha de seis victorias seguidas en Manresa tras perder claramente contra el BAXI Manresa por 87 a 72. Los verdinegros, con la ausencia de última hora de Artem Pustovyi por un proceso vírico, se han visto superados en todo momento por los manresanos. Una derrota que hace que la Penya cierre la primera vuelta con un balance de 11-6, clasificado para la Copa del Rey, pero sin ser cabeza de serie.
Los manresanos arrancaron con un extra de energía, dominando los primeros minutos de juego, 10-4. La ausencia de Pustovyi obligaba a Ruzic (que volvía después de meses lesionado) a jugar de 5 en la primera rotación, siendo los locales superiores al inicio en la pintura. El acierto en el triple de Alston y Reyes ha hecho que Miret detuviera el duelo, 16-8, y al final del cuarto, la Penya perdía 24 a 18.
El Joventut ha estado casi tres minutos sin anotar en el segundo periodo, lo que ha aprovechado el Manresa para escapar al marcador, 32-18. Los verdinegros no se encontraban cómodos y la desventaja seguía creciendo, 41-24. Al descanso, la superioridad local era notable, 45-27.
La Penya lo ha intentado pero sin éxito. Los locales seguían con un extra de intensidad y la desventaja alcanzaba los 22 puntos, 63-41. De la máxima manresana, el Joventut ha logrado reducir el margen al final del tercer cuarto, 63-47.
Un triple de Dekker bajaba la diferencia a los 13 puntos, 63-50, pero los locales han estirado de nuevo el margen, obligando a Miret a pedir tiempo muerto, 68-50. La máxima ha sido de 23, 76 a 53, antes de que los verdinegros redujeran la diferencia gracias a la inspiración de Robertson, 82-70. Al final, 87-72 con Dekker como máximo anotador con 20 puntos.
Los manresanos arrancaron con un extra de energía, dominando los primeros minutos de juego, 10-4. La ausencia de Pustovyi obligaba a Ruzic (que volvía después de meses lesionado) a jugar de 5 en la primera rotación, siendo los locales superiores al inicio en la pintura. El acierto en el triple de Alston y Reyes ha hecho que Miret detuviera el duelo, 16-8, y al final del cuarto, la Penya perdía 24 a 18.
El Joventut ha estado casi tres minutos sin anotar en el segundo periodo, lo que ha aprovechado el Manresa para escapar al marcador, 32-18. Los verdinegros no se encontraban cómodos y la desventaja seguía creciendo, 41-24. Al descanso, la superioridad local era notable, 45-27.
La Penya lo ha intentado pero sin éxito. Los locales seguían con un extra de intensidad y la desventaja alcanzaba los 22 puntos, 63-41. De la máxima manresana, el Joventut ha logrado reducir el margen al final del tercer cuarto, 63-47.
Un triple de Dekker bajaba la diferencia a los 13 puntos, 63-50, pero los locales han estirado de nuevo el margen, obligando a Miret a pedir tiempo muerto, 68-50. La máxima ha sido de 23, 76 a 53, antes de que los verdinegros redujeran la diferencia gracias a la inspiración de Robertson, 82-70. Al final, 87-72 con Dekker como máximo anotador con 20 puntos.