La acción tendrá lugar durante el partido FIATC Joventut - Unicaja de Málaga de este domingo (13h)

Amnistía Internacional recogerá firmas en el Pavelló Olímpic para la campaña "Personas que actúan por personas" del domingo 6 de diciembre, en la que se pedirá la libertad de una familia siria desaparecida durante el conflicto armado en su país, y por dos jóvenes activistas de la República Democrática del Congo detenidos por sus actividades a favor de los derechos humanos.

En el contexto del Día Internacional de los derechos humanos (10 de diciembre), Amnistía Internacional moviliza un año más a la ciudadanía de todo el mundo para mostrar la presión cada vez mayor a que se somete la libertad de expresión y reclamar la libertad de personas encarceladas o que podrían ser juzgadas como precio por su disidencia pacífica.

En la campaña de 2014 se batieron récords: cientos de miles de personas de más de 200 países y territorios enviaron 3,2 millones de mensajes de apoyo a los casos de 12 personas y comunidades que sufrían abusos contra los derechos humanos.

En concreto, durante el partido de la Penya, los asistentes al partido podrán firmar en apoyo de dos casos concretos:

-  Yves Makwambala y Fred Bauma (RD Congo): fueron detenidos en marzo de 2015 cuando participaban en una rueda de prensa del movimiento juvenil Filimbi. Este movimiento anima a la participación de jóvenes en acciones y debates políticos pacíficos. Están acusados ​​de traición, intento de golpe de estado y tentativa de asesinato del jefe de Estado. Amnistía Internacional los considera presos de conciencia y pide a las autoridades de la RDC su liberación inmediata e incondicional.

-  Rania Alabbasi y su familia (Siria): Rania Alabbasi es una dentista de éxito en Damasco y madre de cinco niñas y un niño. El 9 de marzo de 2013 agentes del gobierno sirio llegaron a su casa y se llevaron a su marido Al día siguiente, volvieron a buscarla a ella y sus hijos. No se ha vuelto a saber nada de ellos desde entonces.

"En muchos países del mundo, las personas que expresan una opinión que no gusta a los gobernantes sufren un riesgo cada vez más alto de ser castigadas o juzgadas", afirmó María Cañadas, presidenta de Amnistía Internacional Catalunya. "Ahora más que nunca, debemos mostrar nuestra solidaridad con las personas valientes que se alzan por los derechos humanos a pesar de los riesgos. Puede que los defensores y defensoras de estos derechos sean las víctimas inmediatas de la represión, pero todos pagamos el precio si el resultado es una sociedad donde la gente tiene miedo de decir lo que piensa ", dice Cañadas.